"Leer el periódico tranquilamente en un rincón fresco y tranquilo de la casa, es un acto osado porque es tener ganas de que las malas noticias te llenen de miedo y preocupación.
La noticia principal a referir dice: China rompe la cooperación con EE.UU. y sanciona a Nancy Pelosi, la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Parece que Pekín se molestó por la visita de la que no duró ni 24 horas, que hizo Nancy a Taiwán. El simple hecho de esta visita que puede comprenderse como un acto político habitual, a China le intimidó, respondiendo que congela la cooperación con Washington en asuntos claves como el medio ambiente (el cambio climático) y suspende las reuniones militares claves (en la seguridad marítima) y de alto nivel con la mayor potencia mundial, y en asuntos de inmigrantes ilegales. También anunció que sancionará la política estadounidense y a sus familiares cercanos. Un gesto por la actuación en contra de Pelosi, la segunda sucesión del actual presidente, Joe Biden.
Parece que esta visita a Taiwán, interfirió en los asuntos internos de China, alegando que socava la soberanía y la integridad territorial china. En pocas palabras: se sienten amenazados.
China, al parecer, respondió lanzando en unas maniobras militares, cinco misiles que aterrizaron en una zona económica de Japón. Un acto polémico por esta visita. Taiwán es una línea roja, una frontera no oficial, pero que hasta ahora se respeta.
Con toda esta parte de noticia, se quiere decir que, el mundo no está exento de un gran peligro de una guerra mundial. Cualquier relación política que un país puede buscar en otro, como seguridad o de comercio; hay otro pais que se siente amenazado porque lo considera una provocación. Son hechos que hacen crecer una inestabilidad y una tensión de alta amenaza global.
Para recordar, Taiwán es un país de 23 millones de habitantes. Ocupa un lugar geopolítico muy estratégico y un enclave tecnológico esencial para el mundo. Además es insustituible por ser el gran productor mundial que abastece los semiconductores y chips para el funcionamiento de: coches, electrodomésticos, cámaras, móviles, ordenadores, satélites, drones, misiles, y un sin fin de artículos más. Sí Taiwán no pudiera exportar más, casi todas las fábricas del mundo se detendrían en tres semanas... Todo es Made in Taiwán. (datos El País 6-8-2020)
Lo pequeño, lo que es minúsculo; como lo demuestra un virus, y como lo es un diminuto chip, a lo que es invisible a nuestros ojos; pueden poner por su importancia, un estado de inestabilidad grave en todo el mundo."
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