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| Ilustración de Mateusz Nowakowski |
"Un joven individuo subió al autobús, pasó su tarjeta de peaje, y a continuación como si fuera un religioso predicador y con sus manos opuestas, empezó a sermonear en voz alta dentro del vehículo a los diez pasajeros que a primera hora de la madrugada, nos dirigíamos ya algo cansados a casa. En todo su trayecto no paro de alabar las palabras de Jesucristo, diciendo que él era nuestra salvación. En voz alta, nos dijo que éramos unos pecadores desde el momento que nacemos, y que a partir de ese instante, dentro de nosotros, con nuestros pensamientos y actos, no conseguíamos otra cosa, sino, hacer crecer un conflicto interior. La vida se llena de insatisfacción y de vacío - decía -. Su discurso lo hacía mientras paseaba a lo largo del pasillo del autobús, mirando directamente a los rostros de sus asombrados pasajeros como si necesitase la aprobación de cada uno. Nos aconsejaba que pusiéramos en práctica un extraño desarrollo personal de tal manera, que parecía un enviado del cielo o un gurú, que insistía en esa recomendación para esa transformación del espíritu tan especial, y que todas nuestras respuestas a ese malestar permanente, estaban escritas en la Biblia. Entre sus manos llevaba una pequeña e icónica postal del divino con su rostro de paz, que a la vez, miraba y nos lo mostraba continuamente. Comentaba agradecidamente, que todo lo que decía le salvó de una mala experiencia y de caer por desesperación en drogadicción. Siguió expresando, que había recibido una iluminacion divina, un comunicado con mucha fuerza y luz, y que había sido elegido como mensajero para difundir las sagradas palabras."
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"El hombre corpulento y sabio que siempre fue, ahora necesitaba del empuje de un familiar en su silla de ruedas que le transporta y que gracias a ello, le permite salir a la calle. Ese impedimento no ha dejado que este hombre cese de mostrar su sabiduría. Todavía se puede mantener una conversación extensa, sólo la impaciencia del familiar que empuja esa silla, hace mantener una breve conversación.
Sabe manejar muy bien internet, sabe localizar perfectamente las noticias que le interesan, sobretodo busca la -otra verdad- de las cosas. Lo que se oculta de la política y de todos sus movimientos que repercuten en el mundo. Sus conversaciones a veces parecen visionarias, expectativas y especulaciones de lo que puede suceder en un corto futuro. Puedo garantizar, que es algo exagerado en sus premoniciones, pero de todo lo que dice, siempre hay algo que termina por ocurrir. Es un experto confidente de entramados y conspiraciones de toda clase. Un conocedor perfecto de la masonería, de expedientes X, de temas sobre el negacionismo, de intrigas políticas que no se visualizan, - la verdad es oculta- dice. Parece que sabe perfectamente las estrategias que encauza el BCE sobre una población que no tendrá que utilizar la moneda; lo que se habló y lo que se acordó en tal y cual conversación del G-7. A veces nombra a los Illuminati, otras nombra al Club Binderberg, los intereses reales de las últimas guerras; y el quien obedece a quien, etc.. Así sucesivamente. Conversaciones que hay que reflejar un cierto interés y de la que no se puede hablar con cualquiera. Siempre le encanta exponer todo esto cuando me encuentra. Sucesos sorprendentes e increíbles, suposiciones y algunas teorías que me comentó en otros momentos, están sucediendo en la actualidad."
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