"Érase una vez Brahmadatta, rey de Benarés quien tenía cuatro hijos. Cierto día, fueron a buscar al cochero y le dijeron que deseaban que les llevasen a mostrarles a ver - un Árbol del Amor-.
"Muy bien, así lo haré", respondió el cochero. Pero el cochero fue mostrando uno a uno, un árbol en particular. Así tomó al mayor de los hijos, y lo condujo al bosque enseñándole el árbol en la época en que las yemas comienzan apenas a brotar de sus ramas. Al segundo hijo, le mostró otro árbol cuando sus hojas están verdes. Al tercer hijo, otro árbol en su época de floración, y al cuarto y último hijo, cuando el árbol contenía sus frutos.
Después de esto, sucedió que estando los cuatro hermanos juntos, alguien les preguntó: -¿Que clase de árbol es el del amor?.
- Como una cepa quemada-, respondió el primero.
El segundo exclamó: - Como una higuera de agua-.
-Como una acacia-, dijo el tercero.
El cuarto hijo dijo: - Como un manjar-.
Quedaron tan sorprendidos con sus diferentes respuestas que fueron apresuradamente a la presencia de su padre. Señor, -le preguntaron-, ¿Cómo es el árbol del amor?.
-¿Qué es lo que decís vosotros?-, preguntó el rey.
Cada uno volvió a repetir su respuesta. El rey le replicó:- Los cuatro habéis visto el árbol. Pero, cuando el cochero os lo mostró, ninguno de vosotros le preguntó:
El árbol es siempre así, o cambia con las diferentes épocas?. No hicisteis ninguna distinción y éste es el motivo de vuestro error-. Y recitó entonces está primera estrofa:
- Todos han visto al Árbol del amor. ¿Cual es el motivo de vuestra perplejidad?. El no haber preguntado al cochero: ¿Que forma mantiene a lo largo del año?." (Cuento Jataka).
*El cuento Jataka es una leyenda muy antigua que narran las vidas anteriores de Buda, y a través de ellos, la enseñanza budista. Cuentos y relatos que popularmente se transmitían oralmente. El Árbol del amor, suelen también denominarse - Árbol de Judea-.
Moraleja: "El amor no tiene edad, y tiene diferentes maneras de mostrarse. Y a pesar del transcurso del tiempo, y cambie sus formas, el amor y la belleza siempre está presente. De ello, su apreciación también depende de los sentimientos y la fase de madurez, y los ojos de quien lo mira"
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