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26 feb 2025

La Sustancia. Comentario del film.

 "La amistad es un pacto, una convección. Dos seres se comprometen tácitamente a no decir jamás lo que en el fondo piensan uno del otro. Una especie de alianza hecha de precauciones". (Emil Cioran)


   La sociedad moderna es muy exigente en muchos aspectos. Nos exigen y nos exigimos. El ritmo de vida cada vez es más acelerado. El tiempo parece que tenga otra medida, pues su transcurso es más rápido, incluso faltan horas para toda aquella persona que se sienta activa. Muchas veces para superar ese ritmo, el stress, o simplemente no perder la admiración, se recurre a ciertas sustancias para el rendimiento exigido. Esas sustancias a veces se logran bajo receta médica; pueden ser calmantes antidepresivos o bien anímicos. Pero hay otros, no tan bien vistos, que su publicidad sólo es mencionada de boca en boca, suministrada en suburbios y por individuos al margen de la sociedad. Muchos drogas tienen clasificaciones, unas de fácil acceso y otras no; las hay de tipo anfetamínico, ácidos y otras más fuertes y usuales que por su prohibición requieren un narcotráfico.

   La sustancia a la que se refiere el film es experimental y novedosa. El contacto es un número de teléfono que siempre parece que está activo para sus consultas, y de preguntas hay muchas y otras que pueden hacerse el espectador.

    El motivo para necesitar esa sustancia ha sido la baja audiencia de un programa diario de televisión que realiza y presenta la famosa estrella de cine y ahora bailarina de aeróbic llamada Elisabeth Sparkle. El director de ese programa llamado Harvey (Dennis Quaid) es un alocado tipo (que por su interpretación nos puede hacer recordar al presidente Trump), decide sustituirla por otra más joven que cumpla unos exigentes requisitos para atraer al máximo público.

   Elisabeth (interpretada fabulosamente por Demi Moore) es la víctima de ese despido que coincidía precisamente con su cincuenta aniversario. Mientras regresa a casa, un despite por culpa de un anuncio publicitario, le hace tener un accidente de automóvil. Por suerte, en su revisión médica sale sin ningún hueso roto pero con la moral baja. Ese detalle es observado por un asistente del centro que disimuladamente, le mete en su bolsillo, un pendrive con una publicidad detallada de una novedosa sustancia regeneradora.

   Cuando Elisabeth ve la publicidad en su TV no le hace mucho caso, pero pasan las horas y la injusticia de ese despido después de muchos años de trabajo y de éxito le corroe los pensamientos. Poco después, hace una llamada al número indicado solicitando esa prueba que parece milagrosa, pues promete rejuvenecer, vitalizar,etc... El contacto por teléfono es escueto y a los pocos días, recibe un sobre por correo con una tarjeta con el número 103, que le permitirá tener acceso a los accesorios con los componentes y la dosis que recogerá en un cierto buzón de un extraño edificio.

   Los utensilios recogidos están diseñados para ciertos días de la semana. Sus accesorios son un pequeño equipo similar a un botiquín con jeringuillas y componentes químicos que se ha de inyectar dosificadamente y bajo estricto control. 

   A partir de esa primera imagen de dosificación, el film no está hecho para personas hipocondriacas, pues el uso de las jeringuillas y las transfusiones de sangre entre otras, ya es un elemento frecuente. 

   La primera prueba tiene su éxito, y de su persona sale otra más joven y bella (como si una costilla de Adán se tratase), que toma el nombre artístico de Sue  (interpretada por Margaret Qualley). Las instrucciones de uso y del equipo ya dice que son dos personas en una. El inconveniente es que se han de turnar semanalmente, pues en esas cambios y transfusiones, una permanece inconsciente. Esto es un proceso regenerativo que han de tener la precaución de respetarlo y que es explicado en el film en esas consultas telefónicas.

   Una curiosidad del film (y que pueden haber influencias por las películas de David Lynch), es que la mayoría de las escenas se realizan en grandes y decorados habitáculos, de cristaleras y de pasillos profundos, con colores intensos y con alfombras que parecen no tener fin, que recuerdan a las utilizadas para las grandes estrellas del espectáculo.

   La joven causa tanta atracción y tanta sensualidad, que consigue trabajo en la misma cadena televisiva, sustituyendo a la famosa Elizabeth haciendo los mismos shows de aerobic. Su fama es multitudinaria y crece en exceso la audiencia. Su popularidad va creciendo que le aparecen numerosas ofertas de otros programas y revistas. Toda esta popularidad le está imposibilitado el cumplimiento de las respectivas dosis regenerativas. 

   El film, sin ser de la categoría de terror, es terrorífico. Es un triller dramático, psicológico y de suspense. A momentos tiene secuelas de "El retrato de Dorian Gray" del gran Oscar Wilde, pues el tema de la inmortalidad está de una cierta forma presente pero que no se pronuncia. Hay fragmentos que pueden estar inspirados en esa obra genial. De todas las maneras está muy bien lograda. También, tanto en sus comentarios despóticos como en secuencias, se refleja unas realidades, como es la exigencia profesional y de la práctica muy habitual de desprenderse de las personas con cierto maltrato laboral.

   Cómo se ha intentado explicar, estar al día y en popularidad en ciertas profesiones, es un ejercicio que desgasta con el tiempo, y para muchos se hace frecuente el uso de ciertas sustancias que a la larga terminan dominando al individuo.

   Cada minuto de este triller psicológico va aumentando la tensión de su historia.

   La escenas van siendo más violentas entre el trato de las dos personas llegándose incluso a odiar. Son la misma personas, pero por las exigencias laborales y el egoísmo joven de Sue, no se respeta y se va incumpliendo la dosificación de la sustancia cada vez con más frecuencia. Esto es el causante de que el cuerpo de Elisabeth se va deteriorando y haciéndose anciana. La falta de sustancia y de su correcto tratamiento crea el efecto contrario y las consecuencias mayores la sufre ella, porque su cuerpo posee las células madre que deben de tener ese periodo regenerativo. Esos cambios generativos se hacen muy caóticos. Elisabeth quiere poner definitivamente final al asunto, su cuerpo se ha consumido bastante y ya es imposible recuperar el cuerpo que tenía a sus cincuenta años. Cuando está a punto de realizar la fase final, con una terminal inyección, ve dormida a la hermosa joven que a la vez fue y no terminó siendo. En un acto de arrepentimiento quiere recuperarla, y la joven Sue termina despertándose milagrosamente. Eso produce un primer enfrentamiento cuando ambas se encuentran. La joven Sue no tolera ver a la que es ahora una anciana y volver a depender de ella, esto trae un violento enfrentamiento a golpes donde termina muriendo Elizabeth. Y como una es también la otra, la consecuencia no tarda en llegar a Sue.

   Precisamente, es la celebración del año nuevo, donde una audiencia multitudinaria espera despedir el año con la más bella protagonista del programa favorito. Sue llega encantada lujosamente vestida para hacer el programa con espectadores en directo. Pero un poco antes del comienzo, comienza a tener sensaciones de malestar. Acude enseguida al baño y da comienzo a una transformación de su cuerpo convirtiéndola en una sorprendida monstruosidad. Cuando sale al escenario algo camuflada, evidentemente, sorprende a todos. El público en general reacciona asustado ante tal deforme y aberrante cuerpo  (que recuerda al "Hombre Elefante" del film del reciente fallecido David Lynch), que por terror, termina produciéndose una regadera de sangre. El color rojo acaba invadiendo sin parar todo lo relacionado con el show, incluido los espectadores. Esto puede interpretarse como una critica metafórica del deterioro y el olvido que produce el paso tiempo; de desear otras cosas sin apreciar lo que ya se tiene, y por supuesto en este caso; de la tiranía y las exigencias de programas como así la de sus televidentes en el que todos exigen un mayor espectáculo.

   La música del film acompaña a las imágenes impactantes. Aparecen pequeños fragmentos sonoros que pasan desapercibidos de la banda sonora de la película "Psicosis" de Hitchcock  y de la de "2001 Una Odisea en el Espacio"de Kubrick. También el diseño y los maquillajes han conseguido impactar en esta producción que se puede clasificar como una obra maestra cinematográfica, donde pocos directores logran conseguir tanta espectación. Puedo garantizar, que algunos de sus espectadores tuvieron que abandonar la sala en su proyección por el fuerte impacto que produce ciertas imágenes. Una película provocadora de geniales interpretaciones y de buena ambientación merecedora de grandes premios.



 Guión y dirección: Coraline Fargeat. Fotografía: Benjamín krakun. Música: Raffertie. Interpretación: Demi Moore, Margaret Qualley, Dennis Quaid, Hugo Diego García, Philip Schurer. Uk. Usa, Francia. Color 2024.

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