"Milagro en Milán" de VITTORIO DE SICA

"...pero habrá más tierras libres, y serán más fértiles"
  (J.A. Labordeta -cantautor aragones)


*Milagro en Milán una película de VITTORIO DE SICA del año 1950.
Protagonizada por: Francesco Golisano, Emma Gramatica,Paolo Stoppa, y otros no menos importantes. Cuenta con 3 premios. Nacionalidad italiana en B/N.
De espectacular fotografía.
   Una curiosa película que puede tomar fuerza si no fuera porque está olvidada de su reposición de las carteleras del cine y de las filmotecas, que gracias a veces a la televisión pública es posible conocer aunque sea en altas horas de la noche. Quizás cuando ha sido proyectada en nuestras salas, los espectadores de entonces estábamos cómodos y ausentes de las crisis, y se contemplaba con otros ojos lejos de la pobreza, como si fuera agua pasada y que no volverá a ocurrir. Pero para algunos en la actualidad se encuentran sin trabajo y sin vivienda, peligrando la sanidad y la educación pública.
   Milagro en Milán es una película que parece que tome el relevo al cine mudo, pues contiene los elementos de este cine. Cuenta con una perfección de blanco y negro, y sus personajes tienen los ingredientes (sus caras, sus cuerpos, sus formas y sus sombras) para formar esa película perfecta que el director Vittorio de Sica sabe componer en una Italia apocalítica, desolada, llena de pobreza y de miseria.
   "Totó, es un niño que se queda huérfano. Las imagenes del niño ya es por sí sobresaliente en esa soledad en blanco y negro que es permanente en el film. Las autoridades se hacen cargo del niño mandándolo a un orfanato.
   Cuando ya se ha hecho mayor, Totó sale del orfanato para enfrentarse a ese mundo desolado y frio. Pero lo hace con buen humor y con esperanza deseando los buenos días con todo aquel con que se encuentra, aun siendo el mundo desagradecido.
   Intentando encontrar un lugar y trabajo, llega la noche y acercándose a una multitud donde curioseaban a unos lujosos ostentosos a la salida de un hotel, un pobre ladrón le roba el maletín donde Totó  llevaba una foto de su madre y unas camisas. Se da cuenta y a lo lejos ve como el ladrón se va con el maletín y Totó le sigue.
   Cuando consigue alcanzarlo, le pide el maletín amablemente que se lo devuelva confesándole que no lleva nada de valor. Pero el ladronzuelo se lo devuelve diciéndole que le gustaba el maletín.
Totó se lo queda mirando y se lo regala sin sus pertenencias. El ladrón se pone muy contento, y Totó le pregunta donde podía pasar la noche. El ladrón viendo su amabilidad le invita a pasar la noche en su casa.
   Cuando amanece, en la pantalla vemos a un campo desolado con pequeñas chozas hechas con cuatro chapas donde otros pobres se refugian del inmenso frío. Vemos a Totó que sale de una de esas chabolas dando las gracias y contento pero tiritando de frío. Cuando de repente aparece el Sol, todos acuden a calentarse al rayo solar. Una imagen impactante, donde se puede apreciar la más alta cumbre de la pobreza. Un extraordinario Vittorio de Sica, donde supo exponer y dar significado a esa luz.


De repente viene un extraño y frío vendaval, y Totó protege a una niña con la que estaba jugando, y el viento se lleva todas las chapas de las chabolas perdiéndose en el aire.
   Al paso de unos días, Totó se ha hecho como un líder carismático, donde ha logrado construir una especie de barrio con sus calles de los mismos desechos de las basuras. Todo es reutilizable y de gran utilidad. Todos los indigentes cooperan formando un gran grupo de trabajo, con Totó han reencontrado la ilusión y la esperanza dentro de su pobreza. Donde pueden comprobar que tienen donde vivir aunque sea en  miserias y en chabolas. Totó no deja a ninguno sin atender, ofreciéndose amablemente a todos. De Sica sigue mostrando perfectamente los sentimientos y las carencias humanas tan como lo hizo en su famosa película "El ladrón de bicicletas"
   Van apareciendo más pobres y necesitados que necesitan cobijo, y Totó y los suyos siguen su solidaridad ofreciendo casas y coolaboración. Poco a poco va formándose y naciendo un nuevo pueblo inclusive con una figura femenina que se rige como un monumento al que levantan encontrado también en las basuras.
   De repente aparecen las instituciones con un gran capitalista inversor e inmobiliario llamado Mobi, con planes de construir en ese descampado unos edificios. Cuando ve a todos esos pobres e indignados no le faltan palabras para salir del paso y salvar su presencia engañándoles y prometiéndoles con cuatro simbólicas tonterías.
   Cuando ya está casi terminado el pueblo, hacen como una especie de inauguración con actos y juegos populares. También se rifa un único pollo frito, que el afortunado agraciado no se acaba de creer. Se come el pollo entero en presencia de todos como si fuera un espectáculo, y cuando termina su banquete, es inmensamente aplaudido. También forma parte de un espectáculo, la contemplación de la puesta de Sol.
  En el transcurso de la fiesta, intentan colocar un poste para un juego. En el intento de hacer el agujero aparece un líquido que no es agua, sino dicen ser que es petróleo. Enseguida un traidor con aires de grandeza, coge una muestra en una vieja lata y no tarda en avisar al inversor Mobi.
   El capitalista Mobi no tarda en aparecer con los suyos y su guardia personal para desalojarlos. Pero Totó y una representación del pueblo se plantan haciendo frente y resistencia a su desalojo, formando barricadas con todas sus míseras pertenencias. La policía no tarda en combatir con gases y chorros de agua a la multitud que formaba resistencia. De Sica introduce como solución al conflicto, una oración que hace Totó en recuerdo a su madre, en la que está se le aparece en la imaginación, ofreciéndole como ayuda a una paloma diciéndole que haga buen uso de ella.
   La paloma es el utensilio que utiliza el protagonista para luchar y hacer resistencia, en la que va apareciendo objetos que van frenando las ofensivas policiales. Aqui es donde aparece los toques humoristicos del film. La gente de este nuevo pueblo está sosprendida con la nueva arma de Totó (la paloma) que ven como concede sus deseos. Y como un nuevo mesías, va concediendo los deseos que sus amigos le piden: abrigos, mobiliario, sombreros, ropa, calzado, etc...intentando satisfacer a todos. El pueblo se suma en una celebración, donde Totó también descubre el amor.

La paloma también es el símbolo que es utilizado en el film, como la esperanza, la resistencia, la fe. Como siempre las batallas las gana el más fuerte, y el pueblo es desalojado y destruido por las fuerzas del poder. El populacho marcha en manifestación tras los pasos de Totó; con ilusión y fuerza, porque saben que pueden empezar en otro sitio, y que otro lugar es posible.
   Así termina el film, una película que podían hacerse suya los indignados que ocuparon las plazas en los dos últimos años. El director nos hace recordar que es una vieja batalla que toma sus riendas cuando las injusticias y la desesperación se adueñan totalmente de la moralidad del hombre, y que solo el hombre es capaz de retomar cuando ya no tiene nada que perder, o ya lo ha perdido todo.

*VITTORIO DE SICA (1901-1974) nació en SORA (Italia). Un director clave del cine llamado neorrealismo italiano . En España se le conoció por dos famosas películas "El Limpiabotas" y la otra más conocida "El ladrón de bicicletas". Después "Milagro en Milán" (1950), "Umberto D" (1952). Posteriormente volvió a coger fama con "Dos Mujeres" (1961) con Sofía Loren como protagonista, a la que le valió el oscar a la mejor actriz. También antes en 1953 realizó la película "Estación Termini", y en 1980 otra grande con "Los Girasoles". Un director ganador con cuatro oscars, comprometido siempre con los grandes problemas de la sociedad, reflejandolo al máximo en sus películas.